La vida está en movimiento constantemente, incluida la historia de la Iglesia, naciendo nuevos profetas, nuevos santos, quienes nos indican que miremos hacia adentro, que enfoquemos nuestra vida en la comunidad y en la obediencia a la voluntad de Dios, que nos dice busca al otro, y si no llevamos a la praxis esto, quiere decir que nuestra fe no gira alrededor de Jesucristo.